La Bitácora es un sueño compartido que se hizo realidad gracias al inmenso apoyo recibido por parte de mucha gente. especialmente q u e r emo s a g r a d e c e r a l o s comerciantes, porque en tiempos de crisis decidieron apostar por un emprendimiento local que apenas está dando sus primeros pasos. Este número está dedicado a quienes integran las instituciones de Claromecó, un grupo inabarcable de gente muy heterogénea que trabaja todo el año, no desinteresadamente, porque su interés existe y es el bien común; sí incansablemente, porque no hay otra forma de permanecer en este camino. De las entrevistas, las reuniones, las charlas informales, quedamos impactados por una realidad insospechada: son muchos, muchísimos quienes construyen el Claromecó que soñamos, y lo construyen para todos. La Bitácora nace por la simple necesidad de quienes vemos con inquietud que las noticias que nos importan a todos, no son noticia. Que se nos ve desde fuera con ojos críticos, vacíos del cristal con que observamos los que amamos este lugar en el mundo, los que conocemos el trabajo parejo y esforzado que lleva hacer realidad el sueño de ser nosotros mismos.Vemos también que la urgencia de la novedad, las corridas de temporada y los espejismos comerciales hacen que algunos medios emigren con las golondrinas. A los que se quedan, nuestro reconocimiento sincero, porque también ellos hacen un gran trabajo. En fin, como decía un estimado periodista local: “esto va dedicado a los que dicen que en Claromecó no pasa nada.”
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